UNA SEMANA CON EL DKV JOVENTUT

¿Cómo entrenan los equipos de ACB? ¿Con qué sistemas explotan los técnicos las cualidades de sus jugadores? ¿Qué metodologías de trabajo utilizan? ¿Cuánto tiempo destinan a estudiar al próximo rival? ¿Cuál es la filosofía de un club de la máxima categoría de nuestro baloncesto? Éstas son sólo algunas de las muchas preguntas que pudieron resolver una veintena de entrenadores que asistieron la semana pasada (del 26 octubre al 1 de noviembre) a los entrenamientos del DKV Joventut de Badalona en una actividad organizada por la asociación española y la asociación catalana de entrenadores de baloncesto, entre los que me encontraba yo mismo. Ya son cinco las ediciones de este programa que pretende que entrenadores de nuestro deporte puedan formarse asistiendo durante una semana a todos las sesiones de entrenamiento de un equipo ACB. En la edición de esta temporada, el DKV Joventut de Sito Alonso ha sido el primer equipo que ha abierto sus puertas para que estos técnicos puedan conocer la realidad del trabajo diario de un equipo profesional.

La semana de entrenamientos

El equipo comenzó el lunes por la mañana visionando algunos de los múltiples errores cometidos contra el Barça y tratando de corregirlos en la pista a través de ejercicios que pretendían seguir inculcando la filosofía defensiva del club de Badalona. "No existe el descanso mientras se está en pista" era la idea que repetía una y otra vez Sito Alonso a sus jugadores para inculcarles que debían rendir al máximo mientras estaban en el parquet. Con las consignas “Tú descansa que yo no puedo”, “Pasaba por allí” y “No lo hagas tú solo”, el equipo trabajó situaciones en que la intensidad defensiva era máxima para tratar de provocar errores al rival. La semana comenzaba con Mario Fernández aquejado de un golpe en el partido contra el Regal FC Barcelona y con las caras largas de unos jugadores que no se esperaban una derrota tan abultada en el Palau Blaugrana. Por la tarde volverían a entrenar centrándose de nuevo en la defensa con mini encuentros de tres contra tres y cuatro contra cuatro, donde se veían situaciones concretas de partido que el cuerpo técnico del Joventut quería mejorar.

Un equipo como la Penya busca además de vencer encuentros, tratar de mejorar individualmente a sus jugadores sea cual sea la edad y la calidad de éstos. No se limitan a trabajar con las categorías de formación sino que también busca mejorar a los integrantes del primer equipo. Ricky Rubio y Pau Ribas son los dos últimos ejemplos de jugadores que se han consagrado en Badalona pero Cristian Eyenga y Pere Tomás siguen sus pasos evolucionando minuto a minuto en las pistas del Palau Olímpic. Por ello, el martes por la mañana, los técnicos estuvieron desde las 9.00 hasta la 13.00 entrenando la técnica individual de los verdinegros en grupos de tres. Eduardo Hernández Sonseca, Dimitri Flis (que no puede jugar con el DKV por su condición de comunitario) y el jugador vinculado del Prat, Federico Aguerre, fueron los más madrugadores para mejorar su velocidad además de su defensa en el poste bajo. Posteriormente serían Henk Norel, Alain Koffi y Antonio Bueno los que realizarían estos ejercicios y más tarde llegarían al pabellón los jugadores exteriores. Uros Tripkovic realizó un trabajo específico de bote junto a Josep Franch mientras que Tucker lanzó cerca de 300 tiros a canasta. Pere Tomas, Cristian Eyenga y una de las sensaciones del Prat Joventut, el checo David Jelinek, fueron los últimos en ejercitarse. Con el paso de la semana, aumentaban los problemas para el técnico madrileño formado en Aragón. A la baja de Mario Fernández se unía Kristaps Valters con fiebre y problemas intestinales, que le impidieron ejercitarse durante buena parte de las sesiones. Por la tarde, situaciones de cuatro contra cuatro donde se trabajó la defensa de los bloqueos directos y determinadas acciones ofensivas, completaban un inicio de semana agotador con cuatro sesiones en dos días y una carga física muy importante.

Tras el merecido descanso del miércoles, Sito Alonso programó para el jueves por la mañana una suave sesión de tiro desde diferentes posiciones en la que los grandes tiradores del equipo, Tripkovic y Tucker, (Valters seguía sin entrenarse) debían llegar a un porcentaje concreto sin fallar dos tiros consecutivos porque de lo contrario, debían de repetir la serie de nuevo. Los más jóvenes mejoraban detalles de su mecánica de tiro de la mano del gran Josep Maria Margall, entrenador de tiro de la Penya. En la sesión de la tarde siguieron con las situaciones de cuatro contra cuatro en las que buscaban optimizar acciones concretas de los sistemas de ataque que trabajarían ya posteriormente en cinco contra cinco centrándose especialmente en aquellas situaciones en las que quedaban pocos segundos para que finalizase la posesión. La baja de Valters que no volvería hasta el viernes a los entrenamientos y, un golpe de Josep Franch en el partido que disputó el miércoles frente al River Andorra, obligaba a Sito Alonso a llamar al base del Cadete A, Albert Homs, para que entrenase con la primera plantilla. Incluso nos confesó el técnico que de no recuperarse Valters a tiempo y de seguir Franch aquejado de sus golpes, hubiese llamado al joven Xavier Assalit para que jugase junto a Albert Homs frente al Blancos Rueda Valladolid.

Con el paso de los días las sesiones se redujeron para llegar físicamente al 100% al partido del domingo. A diferencia de otros equipos el DKV Joventut y su cuerpo técnico no se obsesionaron en transmitir a sus jugadores las tácticas del próximo rival sino que se centraron en saber defender las diferentes situaciones que se dan en el baloncesto actual. Eso no quiere decir que no se haga trabajo de scouting y que tanto Sito Alonso como sus ayudantes, Pep Clarós y Carles Duran, no se sepan hasta el más mínimo detalle del equipo que tendrán enfrente. De hecho a los entrenadores asistentes nos enseñaron el vídeo que pasaron a la plantilla en el que se veían a los jugadores del Valladolid realizando las acciones individuales de las que más sacaban provecho. El viernes por la tarde se dedicaron a trabajar en cinco contra cinco en corregir detalles del ataque para mejorar la efectividad de los sistemas mientras que el sábado realizaron lo mismo pero de una forma más suave y sin defensores, para repasar las diferentes variantes de los ataques y las posibles respuestas del rival a sus movimientos. Una suave sesión de tiro el domingo por la mañana concluyó con una dura semana de entrenamientos que tuvo esta vez la recompensa de la victoria.

Los entrenadores asistentes entre los que me incluyo pudieron fotografiarse con los miembros del equipo y aprendieron la realidad diaria de un conjunto entendiendo mejor todo aquello que no ven los aficionados durante la semana y que explican el menor o mayor rendimiento de los jugadores el día del partido. A todos les quedarán para el recuerdo las pequeñas anécdotas y predicciones con que nos regaló Sito Alonso en las conversaciones mantenidas al finalizar las sesiones de entrenamiento.

Lo que no ven los aficionados

Sin querer desvelar los secretos del equipo sí que podemos revelar algunas de las dinámicas que posibilitan que el clima interno de trabajo se traduzca en buenos resultados en la pista. La gran aportación de Clay Tucker al equipo sin perder la sonrisa en ningún momento, haciendo de "profesor particular" de Cristian Eyenga y ejerciendo de capitán a la perfección o las ganas de progresar de Uros Tripkovic tratando de mejorar su dominio de balón son algunos ejemplos de jugadores importantes que no se limitan a entrenar para jugar y "hacer sus números" sino que tratan de hacer evolucionar al equipo.

Las novedades de esta temporada aún tienen que "coger el hábito", en palabras de Sito Alonso, de no descansar mientras se está en pista y defender con una mayor intensidad de lo que hacen actualmente pero tampoco los veteranos deben relajarse ya que contra el Regal Barça se demostró que sin estar concentrados, cualquier despiste defensivo les hace vulnerables ante equipos tan potentes como el dirigido por Xavi Pascual. Bien es cierto que la mayoría de errores lo realizaron jugadores que no tienen aún cogidas del todo las claves defensivas del Joventut. Xavi Pascual y Sito Alonso son amigos íntimos desde hace mucho tiempo pero el técnico de la Penya nos reconoció que cuando se enfrentan y los días posteriores al partido apenas se dirigen la palabra ya que cada uno mira por los intereses de su equipo y la derrota frente a los blaugrana la tiene muy presente el técnico verdinegro.

La intensidad y la competitividad que observamos en la semana de entrenamientos fue sorprendente para muchos de nosotros así como el buen ambiente general que se respiraba en un grupo con muchas caras nuevas. La potencia de Eyenga es espectacular así como la gran mejora en el tiro de Pere Tomas, la intensidad de David Jelinek o la capacidad para asistir de Valters. También Koffi se ha convertido en pocas semanas en una pieza muy importante para Sito Alonso como ya se demostró contra el Cajasol con la ejecución de la "Koffi Zone" en la que se pudo ver al pívot francés defender de arriba abajo como ya hiciera Aito García Reneses con Kenny Simpson en el Barça, con Anangonye en el Joventut o más recientemente con Carlos Jimenez en el Unicaja. Sito Alonso ya la hizo el año pasado con Mensah Bonsu y este año la realizó con Koffi con muy buen resultado y remontando un partido que tenían perdido con 15 puntos de desventaja en el tercer cuarto.

Para Sito Alonso los resultados son finalmente los únicos que dictan la buena o mala marcha de un equipo (y sino que se lo digan a Aito en el Unicaja) pero creer en una filosofia propia de trabajo como único medio para obtener los objetivos colectivos e individuales en un equipo a largo plazo dan la confianza necesaria para creer que los buenos resultados llegaran tarde o temprano. No siempre es positivo ganar a toda costa y no todas las victorias son siempre positivas. La gran conclusión que se puede sacar de esta actividad es que el trabajo diario es el único camino que conduce el éxito.